Por Ana Vallina Bayón, en el Wikidiario (con permiso)
25 de junio de 2012
El ecosistema único de este espacio natural protegido sufre el impacto del tráfico aéreo, del puerto de Barcelona y la urbanización constante de su entorno.
El último informe Silmar de la Fundación Mar ha dejado patente que el delta del Llobregat continúa siendo uno de los entornos del litoral catalán más degradados. La estación de control situada en el humedal cercano al puerto de Barcelona arroja preocupantes cifras sobre los niveles de contaminación de este oasis acuático y no supera el 3.5 de valoración. “Es difícil encontrar indicadores de recuperación”, señala Miquel Ventura presidente de la Fundación Mar, quien sin embargo, al mismo tiempo, se muestra optimista con la enorme capacidad de mantenimiento del propio mar y con la creciente implicación ciudadana como herramienta activa de conservación.
La laguna del Remolar aglutina numerosas especies vegetales y naturales
El delta del Llobregat ocupa cerca de 100 kilómetros cuadrados en la desembocadura de un río con una explotación tan intensa que sólo es comparable con la del Ganges o el Nilo. Tras la progresiva industrialización y urbanización del Baix Llobregat, que comenzó en la década de los sesenta, la zona agrícola, pese a ser la más fértil de Catalunya, fue cediendo paso a las infraestructuras, hasta reducir al 50% los espacios verdes del delta. Estos espacios están ahora protegidos por la Generalitat y la legislación europea, así como aglutinados en El Remoral y el Estany de la Ricarda. Su futuro, aún así, puede verse amenazado si el proyecto Eurovegas llega a realizarse.
Mapa del delta del Llobregat en los años 20
Mapa del delta del Llobregat en 2011
Bajo los aviones, tras las fábricas, junto a los barcos
Un agradable camino bordea la laguna del Remolar y ofrece variados miradores para contemplar alguno de los ejemplares de la riquísima flora y fauna que atesora este rincón de Barcelona. En el delta de Llobregat se calcula que viven 340 especies diferentes de aves, 22 de anfibios, además de variedades de peces y flora acuática endémicas.
Durante unos minutos, tan sólo unos instantes, el gorjeo de los pájaros armoniza con el chapoteo de los patos en la laguna del Remolar. Tan sólo unos instantes, porque el estruendo de un avión que sobrevuela a muy corta distancia este espacio natural protegido rompe la candencia de la naturaleza y nos recuerda dónde se encuentra ubicada la laguna, a tan sólo unos kilómetros de las pistas de El Prat, y bordeada por el puerto de mercancías de Barcelona.
“La contaminación que soportan estas aves es de todo tipo: a través de las sustancias en el agua, acústica con los aviones sobrevolando sus nidos y lumínica por las noches”, enumera Jaume Grau, portavoz de Ecologistas en Acción. La organización vigila de cerca la progresiva degradación de un entorno sobre el que, según denuncian, han llegado a construir sobre zona de especial protección, legalmente reconocida, un gran aparcamiento para taxis, así como para los visitantes del parque natural, generalmente conservacionistas o escolares.
Un avión sobrevuela una familia de patos sobre la laguna del Remolar
El plan Delta, desarrollado en los años 90 y que perseguía convertir Barcelona en referente del tráfico marítimo y aéreo ha supuesto para Ecologistas en Acción un punto de inflexión irreversible de cara a mantener el ecosistema del delta del Llobregat. Dentro del citado plan de reconversión se enmarcan la nueva terminal del aeropuerto, el desvío de la autovía, el desvío del último tramo del Llobregat y el trazado ferroviario del AVE.
Por su parte, la ampliación de las terminales del puerto ha acarreado nuevos impactos sobre el ecosistema de la zona. La construcción de un nuevo espigón de cuatro kilómetros de longitud ha producido un impacto muy negativo en el litoral al sur del puerto. El hormigón de la nueva estructura marítima frena las corrientes naturales del golfo de León, que de Noreste a Sureste transportan sedimentos y arena. Las mareas cambian su trayectoria y provocan grandes acumulaciones de arena en las playas más meridionales del delta como Castelldefels y Gavà.
El fondo marino y la costa de los espacios naturales protegidos, mientras tanto, no reciben los sustratos y minerales con los que las corrientes marítimas nutrían su basamento. Los temporales pueden arrasar el vulnerable y expuesto litoral de El Prat. Las administraciones, como solución inmediata, dragan las zonas afectadas y transportan los arenales acumulados hasta las zonas desprovistas. “Esto provoca la consecuente contaminación por el transporte y lo artificial del sistema que no respeta la vida de crustáceos u otras especies”, recuerda Jaume Grau.
Pero la amenaza marítima no es la única que sufre el delta de Llobregat. El río ya no llega de forma natural a su desembocadura. En el municipio de Abrera se capta la mayoría del caudal para ser depurado y devuelto posteriormente, de forma canalizada, a su curso. En paralelo, con la creación del sistema de depuración hace una década, las aguas negras de toda la comarca han dejado de verterse sin ningún tipo de filtro al mar, lo que mejora sustancialmente los niveles de calidad y salubridad del agua del Mediterráneo que baña las costas barcelonesas.
Una parte de las aguas del Llobregat se infiltran en su acuífero a la altura de San Andreu de la Barca, conformando una gran reserva acuática subterránea. Este acuífero también redunda en la humedad de los espacios protegidos del delta que cuentan con un particular microclima, con un mayor índice de precipitaciones.
“El cambio climático y la actividad del hombre están provocando que estas reservas de agua se reduzcan y nos tememos que en poco más de una década el acuífero deje de recibir agua desde su entrada en Sant Andreu de la Barca”, puntualiza Grau.
Por otro lado, las aguas del Llobregat y del Mediterráneo reciben cada día todo tipo de sustancias: aguas negras, residuos industriales de las factorías químicas, metalúrgicas o curtidoras implantadas en la zona, así como insecticidas procedentes de la actividad agraria, metales pesados, compuestos orgánicos persistentes (sustancias sintéticas) o los hidrocarburos de los buques que recalan en el Puerto de Barcelona.
Eurovegas, un final garantizado
En toda esta coyuntura, el fantasma de la construcción del macrocomplejo hostelero y de casinos Eurovegas junto a El Prat se erige como el principal problema que daría al traste con los programas de conservación y recuperación del entorno. “La urbanización sobre el escaso espacio disponible acabaría con el delta del Llobregat tal y como lo conocemos”, sentencia el portavoz de Ecologistas en Acción, Jaume Grau, quien destaca que las políticas verdes aplicadas sí dan frutos. Ejemplo de ello es la colonia de una especie de gaviotas endémica que sólo criaba en varios puntos de nuestra geografía. Ahora unos 500 o 600 ejemplares han recuperado su tradicional hogar para ampliar su descendencia.
Mirador de aves, al fondo la torre de control aeroportuaria de El Prat
Ana es periodista, con experiencia en televisión y prensa escrita. Máster en Relaciones Internacionales y Comunicación.
Reblogged this on Aturem Eurovegas – Salvem el Delta del Llobregat and commented:
Un article molt necesari per comprendre la realitat deltaica i el que perdriem amb Eurovegas.
Crec que el complexe Eurovegas serà una gran inversió
per als que tenen diners però portarà molts problemes per l’entorn natural
i per a la gent de la zona, amb una influència negativa en els seus hàbits de vida.
Per al paisatge serà fatal.
Crec que ja tenen decidit que sigui al Delta: per l’aeroport, per l’Ave i sobretot pel port.
Crec que això de Madrid és una enganyifa per que gent d’aquí pensi que potser val la pena prendre’ls-hi als de Madrid.
molt bon article!!!
és trist veure com l’aeroport divideix clarament el Delta, no podien haber trobat llocs millors no, quines poques ganes de fer bé la feina tenen els polítics!
i amb Eurovegas, adéu qualsevol ampliació del Delta i be, ja veiem les retallades en quan a personal!!
jo es tic anant a Cal Tet i la vegetació no et deixa ja fer fotos amb dignitat, mostra de la manca de manteniment que hi ha!!!
quin desinterès pel medi ambient!
Reblogged this on GRUP WWF-BARCELONA and commented:
Un artículo que resume muy bien la problemática del Delta del Llobregat